Las ponencias de las representaciones de la sociedad civil de la UNI, subrayaron la urgencia de enfrentar la crisis climática, el agotamiento de recursos naturales y la creciente amenaza de enfermedades zoonóticas como el COVID-19. Se enfatizó la necesidad de un cambio radical en los estilos de vida, la organización social y los patrones de consumo, aprendiendo de los pueblos indígenas y su enfoque del «buen vivir». Además, se destacó la importancia de la participación activa de la sociedad civil y los movimientos populares para generar transformaciones significativas que protejan tanto el medio ambiente como la vida humana.